3 razones por las cuales se repara un intercambiador de calor industrial
Los intercambiadores de calor son equipos fundamentales en la industria para transferir energía térmica entre fluidos sin mezclarlos. Sin embargo, debido a las condiciones operativas y la naturaleza de los procesos industriales, estos equipos requieren reparaciones periódicas para mantener su eficiencia y seguridad. A continuación, se presentan las tres razones principales que motivan la reparación de un intercambiador de calor industrial:
1. Desgaste y fatiga térmica en los tubos o placas
Los intercambiadores están sometidos a fluctuaciones constantes de temperatura que generan expansión y contracción de sus materiales. Este ciclo térmico repetitivo puede producir grietas microscópicas conocidas como fatiga térmica, que con el tiempo se convierten en fisuras o rupturas visibles. Además, la vibración y el estrés mecánico pueden provocar desgaste, perforaciones o fallas en los tubos, dañando la integridad del equipo y causando fugas.
2. Obstrucciones por incrustaciones y acumulación de residuos
El paso de fluidos con minerales disueltos, suciedad u otros contaminantes lleva a la formación de incrustaciones dentro de los tubos o canales del intercambiador. Estas obstrucciones disminuyen la transferencia térmica, aumentan la presión de operación y pueden provocar sobrecalentamientos o daños estructurales. La limpieza y mantenimiento regulares son necesarios para evitar este problema común.
3. Fugas por corrosión o fallas en juntas
El contacto continuo con fluidos corrosivos o la utilización de materiales inadecuados puede ocasionar corrosión en los tubos o placas, debilitándolos y formando agujeros o fisuras. Además, el uso incorrecto o desgaste de las juntas y empaques deteriora la estanqueidad, causando fugas que afectan la calidad del proceso y pueden ser riesgosas para la seguridad industrial.
